martes, 2 de mayo de 2017

EMBAJADORA DE ARMENIA EN ARGENTINA ESTER MKRTUMYAN: "EL GENOCIDIO ARMENIO FUE UNA TRAGEDIA HUMANA"

La Prensa dialogó con la embajadora de Armenia en Argentina, Estera Mkrtumyan. Recordó los crímenes y explicó por qué Turquía aún no lo reconoce. Dijo que espera a Macri de visita en su país, y que Francisco mostró en Armenia que el mundo cristiano es único.

"Después de todo, ¿quién habla hoy del aniquilamiento de los armenios?" decía Hitler en 1939, en respuesta a las dudas de los jerarcas nazis de que el holocausto judío pudiera ser descubierto por el resto de las naciones.
Sin embargo, décadas más tarde, el genocidio armenio, el primero del siglo XX, sigue sin ser reconocido por la mayoría de los países, aun cuando las pruebas históricas de que ocurrió son irrefutables. 
Más de un millón y medio de armenios fueron masacrados hasta 1923 por el imperio otomano, comenzando justo un 24 de abril de 1915 cuando las autoridades detuvieron a 235 miembros de la comunidad en Estambul. 
La Argentina -que fue uno de los primeros en reconocer el hecho con Hipólito Yrigoyen- recordó a las víctimas la semana pasada con una serie de actos.
Estera Mkrtumyan, embajadora de Armenia en nuestro país, conversó con La Prensa sobre estos crímenes de lesa humanidad y de cómo se insertó la diáspora en nuestra tierra, donde viven 150.000 conciudadanos. 
-Ha pasado un siglo del genocidio armenio. ¿Cómo lo siente usted? .
-Es el genocidio más silenciado. Cuando ocurrió todavía no existía la palabra genocidio, y ni siquiera la gente podía calificarlo como tal, sólo se hablaba de "gran matanza". Hoy en día la palabra genocidio es el único término legal que existe en el Convenio de Naciones Unidas. 
-¿Por qué cree que Turquía niega el hecho? Alemania, en su caso, reconoce los crímenes cometidos por los nazis y ambos fueron casi lo mismo. 
-Hay varias diferencias en el sentido político. Los dos fueron genocidio, pero el holocausto muestra cómo lo hicieron, no es una palabra legal. Ambos ocurrieron antes del Convenio de la ONU para la prevención del genocidio, que fue adoptado en 1949 y entró en vigor en 1951. 
La diferencia es que nosotros no decimos que el actual Estado turco tiene alguna relación con lo que ocurrió en el pasado. Era el imperio otomano y el gobierno de esa época. El holocausto, además, sucedió en otras partes del mundo, no en su propia tierra, en Israel. En cambio el genocidio armenio sí. 
Aquí está el problema para los turcos, porque el gobierno alemán tuvo la sabiduría y el coraje para reconocerlo, como así también su participación como aliado de los otomanos. El año pasado el Parlamento alemán, en un texto muy fuerte, reconoció su responsabilidad en no prevenir estos actos. 
-El Estado turco afirma que no puede reconocerlo porque era una guerrilla. Ahora bien, es muy difícil creer que la guerrilla tenga 1.500.000 personas.
-¿Alguien puede decir que los genocidios ocurren en épocas de paz? No. Suceden en épocas de guerra, porque se trata de una situación favorable ya que nadie puede controlar lo que pasa. La guerra les permite hacerlo.
-Bueno, lo mismo ocurre hoy en Siria. Porque están matando a la gente y nadie actúa. 
-Claro, lo que pasa es que en Siria hay un conflicto de intereses políticos y económicos. Una limpieza étnica siempre ocurre durante una guerra. 
-¿Cuántos países reconocen en la actualidad el genocidio armenio?.
-23. 
-Estados Unidos todavía no lo ha reconocido. 
-Federalmente no, pero 47 estados sí.
-¿Cree que Donald Trump lo hará?. 
-Trump en su campaña electoral no habló del genocidio. Otros presidentes sí lo hicieron, le hablaban y le prometían a la comunidad armenia de Estados Unidos que lo harían. Inclusive Barack Obama. Pero en este momento yo no puedo adivinar y no puedo decir nada porque estamos esperando los mensajes del 24 de abril, porque este día todos los presidentes leen el mensaje tradicional y, aunque no mencionan la palabra genocidio porque aún no hay ninguna ley, sí se refieren a él como "gran matanza". 
-El único que lo hizo fue Ronald Reagan.
-Reagan y también Wilson. 
-Esto tiene que ver con la alianza que tiene con Turquía. 
-Sí, porque Turquía es aliada de la OTAN y en la región. Siempre digo que nosotros vivimos en una región muy caliente por los países vecinos, por Israel, por Palestina, por Siria, por El Líbano. Siempre hay algo. Nunca tuvimos paz total en la región. 
-El presidente Erdogan logró una modificación constitucional que le permite postularse indefinidamente hasta el 2029, y eso no cayó nada bien en la Comunidad Europea. ¿Usted cree que los gobiernos del Viejo Continente le responderán reconociendo el genocidio armenio?. 
-No creo, porque el reconocimiento del genocidio no es un objeto para regatear o usar con fines políticos. Algunos países puede ser que lo usen como chantaje, pero para mí no es un instrumento para castigar a Turquía. La comunidad internacional ya esperó mucho para que Turquía lo reconozca. Y nadie dice que no existió, todo lo contrario, solamente no tiene reconocimiento oficial. Los únicos países que niegan el hecho son Turquía y su aliado Azerbaiyán. El genocidio tiene que ser reconocido porque fue una tragedia humana. 
-¿Es posible que si Estados Unidos lo reconoce lo sigan otros países?.
-Sí, porque tiene mucha influencia. Por ejemplo, cuando Alemania reconoció su participación como aliado, hubo una oleada de otros países que también se pronunciaron al respecto. Creo que si Estados Unidos lo hace, va a cambiar mucho en el mundo. No se reconoce por motivaciones políticas. 
-Pero el presidente turco también tiene sus dudas en cuanto a la verdad histórica. Había dicho que quería formar una comisión para que se estudie bien el tema. 
-Esta idea es ridícula. Es otro mecanismo de negacionismo. Ellos quieren mostrar que tienen las ganas. la disponibilidad de estudiar... pero la verdad es que no hay nada oculto. Los historiadores no tienen necesidad de estudiar más. Y voy a dar un ejemplo: nuestro presidente (Serzh Sargsyan) dio un paso valiente para establecer relaciones diplomáticas con Turquía sin condiciones, y firmó los protocolos de Zúrich en 2009. Después el Parlamento turco no los ratificó hasta que no se resolviera la disputa de Nagorno-Karabaj. ¿Qué tiene que ver la relación entre los países con este tema? Nosotros no ponemos otra condición, como pueden ser los kurdos o Chipre, pero ellos sí. Y por eso cerraron la frontera hace 25 años sin ninguna explicación, contra todo el derecho internacional. 
-¿No hay ningún tipo de relación comercial entre ambos?.
-No, porque no hay relaciones diplomáticas. Hay una especie de comercio individual donde la gente va y compra cosas en uno u otro país. Hay muchos armenios que viajan de turismo a Turquía, y muchos empresarios turcos que venden cosas en nuestro país, pero no es un nivel significativo. 
LA RELACIÓN COMERCIAL CON ARGENTINA.
-Y en cuanto a la Argentina, ¿cómo está el comercio entre ambos?.
-Acá tenemos muchos empresarios argentinos de origen armenio. Argentina es el quinto país inversor en Armenia, gracias a las inversiones de Eduardo Eurnekian con los aeropuertos, el correo y tierras armenias para producir vino, donde nos ayudaron mucho los especialistas del INTA y de la gobernación de Mendoza, sobre todo para hacer otro tipo de Malbec. 
También hay un banco con capital argentino, incursionaron en el rubro textil, con zapatos, con la cocina armenia... Yo cuando vine a Buenos Aires veía muchos carteles con apellidos armenios como Kalpakian, que es de alfombras, y de inmobiliarias, de cereales. todo eso me sorprendió. 
-Hasta tenemos un tenista como Nalbandian.
-(Risas) ¡Sí! Recién vuelvo de Córdoba, pero no tuve la oportunidad de encontrarme con él. Su padre es armenio.
-¿Tiene pactado o hay en vista algún encuentro entre los presidentes Macri y Sargsyan?.
-Nuestro presidente hizo una visita oficial en 2014 cuando todavía estaba Cristina Kirchner, pero también tuvo una reunión con Mauricio Macri mientras era jefe de gobierno. Allí le dijo que si ganaba las elecciones tenía que viajar a Armenia. Justamente este año se celebra el 25 aniversario de las relaciones diplomáticas entre Armenia y la Argentina, por lo cual hicimos un intercambio de mensajes entre los presidentes y al mismo tiempo se invitó a Mauricio Macri, recordando la promesa que hizo en 2012 cuando visitó Erevan, que en ese momento era Capital Mundial del Libro y pasaron este título a Buenos Aires. Ahora estamos trabajando con la Cancillería en ese tema, porque los presidentes tienen siempre una agenda ocupada y cuando se organiza se hace también una gira regional. 
-¿Cómo tomó el pueblo armenio la visita del papa Francisco?.
-Fue una visita tremenda, muy importante. Tanto desde el punto de vista religioso como político. Hubo muchos mensajes, pero sobre todo, la unidad del mundo cristiano aunque tengamos diferentes denominaciones. Armenia fue el primer país en adoptar el cristianismo como religión estatal en el 301, en el siglo IV. Y el Papa dijo que más que una visita era una peregrinación. De hecho ése era el lema: "Peregrinación al primer país cristiano del mundo". El mostró que el mundo cristiano es único y que hay diálogo entre las diferentes Iglesias. El mensaje político fue que Armenia es un país de paz. 
-¿Cómo describiría al ser armenio?.
-Es un pueblo muy pacífico. Tenemos 3.600 años de historia y durante casi todo ese tiempo estuvimos luchando por nuestra identidad y nuestra religión. Tuvimos muchos siglos sin Estado, pero gracias a nuestro alfabeto pudimos sobrevivir bajo diferentes imperios: el bizantino, el romano, el otomano, el persa, el ruso. Siempre nos ayudaban nuestra fe, nuestra lengua y nuestra Iglesia. Como gente somos muy trabajadores, muy estudiosos y tenaces. Y apenas somos 10 millones de armenios en todo el mundo, viviendo sólo 3 millones en Armenia.


Fuente: Guia Menc